Seguramente ya habrás oído alguna vez el término “hacer la PAU” o “presentarse a la PAU” ¿verdad? Pues bien, si no sabes lo que es, o si necesitas un poquito más de orientación al respecto no te preocupes, te lo explicaremos a continuación.
El término PAU recoge las siglas que hacen referencia al término “prueba de acceso a la universidad” y suele ir de la mano con otras pruebas de acceso parecidas como la PEVAU que también consiste en el acceso a la universidad, aunque con algunas diferencias.
Este tipo de pruebas requieren unos conocimientos previos de ciertas asignaturas y temarios, además de un pago inicial por parte del estudiante para poder realizar la prueba en sí misma.
Diferencias entre las distintas pruebas de acceso a la universidad.
Como hemos mencionado anteriormente, existen diferentes pruebas de acceso a la universidad según la vía de acceso del estudiante:
- PEVAU o EBAU.
La PEVAU o “Prueba de Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad” está dirigida a estudiantes que han completado el Bachillerato, se estructura en una fase obligatoria que incluye Lengua Castellana y Literatura, Historia de España, Lengua Extranjera y una asignatura de modalidad del Bachillerato.
Además de esto, hay una fase voluntaria en la que los estudiantes pueden examinarse de hasta cuatro materias extra para subir de nota. Finalmente, la nota de acceso combina un 60% de la nota media del Bachillerato y un 40% de la fase obligatoria, con la posibilidad de sumar puntos adicionales con la fase voluntaria.
En resumen, digamos que esta prueba es la conocida como “selectividad” que deben superar los estudiantes al acabar segundo de bachillerato.
- Pruebas de acceso para mayores de 25 años.
La PAU está dirigida a personas mayores de 25 años que poseen la titulación de bachillerato pero que no se presentaron a la selectividad antes de cumplir los 25 años.
Es muy parecida a la selectividad y se divide en una fase general, que incluye un comentario de texto, Lengua Castellana, Lengua Extranjera y una materia común, y en una fase específica con dos asignaturas relacionadas con la rama de conocimiento del grado deseado.
La nota final se obtiene sumando la media de las calificaciones de ambas fases.
- Pruebas de acceso para mayores de 45 años.
Esta prueba está dirigida a las personas mayores de 45 años que no poseen titulación universitaria ni bachillerato, e incluye un comentario de texto y Lengua Castellana, además de una entrevista personal evaluada por la universidad.
- Pruebas de acceso para mayores de 40 años con experiencia laboral.
Dirigida a personas mayores de 40 años con experiencia laboral relacionada con el grado deseado, esta vía de acceso evalúa la experiencia laboral y profesional y se complementa con una entrevista personal.
- Estudiantes con títulos internacionales (selectividad para extranjeros).
Aquellos estudiantes que han cursado estudios preuniversitarios fuera de España, pueden acceder a la universidad mediante la homologación del título o realizando la prueba llamada PCE.
¿Cómo puedo prepararme para estas pruebas?
Es crucial que tengamos claro de antemano que para todas estas pruebas debemos prepararnos los exámenes, ya que además de jugarnos la posibilidad de entrar o no en la universidad, estaremos invirtiendo una cantidad de dinero para cada examen.
En este contexto, lo mejor que puedes hacer es apuntarte a una academia según nos recomiendan los profesionales de Centro Universitario San Bernardo, ya que al apuntarte recibirás orientación académica sobre las pruebas y las fechas de examen en todo momento.
De igual forma, para organizarte mejor puedes seguir estos consejos:
- Planificación con antelación.
Divide el temario en secciones más pequeñas y establece objetivos específicos para cada una. Esto te ayudará a tener un enfoque más claro sobre qué estudiar y cuándo.
- Obtén todo el material necesario para estudiar.
Asegúrate de contar con todos los materiales necesarios, como libros de texto, apuntes, recursos online, etc. (Y no olvides utilizar diferentes fuentes de información para prepararte mucho mejor).
- Práctica con exámenes anteriores.
Realizar ejercicios y exámenes de años anteriores te ayudará a familiarizarte con el formato de las pruebas y a identificar tus puntos de mejora.
- Consulta con profesores o tutores.
Si tienes dudas sobre algún tema en particular, no dudes en consultar con tus profesores, tutores o compañeros de estudio; recuerda que además de la academia privada, tienes más opciones disponibles a tu disposición como prepararte los exámenes por ti mismo, unirte a un grupo de estudio y compartir temario con los demás, o acudir a clases de orientación y apoyo para las pruebas en la misma universidad que quieras ingresar.
- Establece metas claras.
Define metas realistas y alcanzables a corto y largo plazo para mantenerte motivado durante tus estudios.
- Mantén una actitud positiva.
Por último, recuerda que la confianza en ti mismo es un aspecto clave para enfrentar con éxito las pruebas. Cree en tus habilidades y esfuérzate por alcanzar tus objetivos.