Buscar un empleo puede ser una verdadera angustia, sobre todo si quieres optar a un puesto que te guste o trabajar en el área en la que te especializaste cuando estudiabas. No es sencillo. Si eres joven, te pedirán una experiencia que, matemáticamente, no has tenido tiempo de adquirir y, si tienes más edad, considerarán que eres demasiado mayor para empezar de cero en una empresa. Quizás hayan mostrado interés por ti en algún lugar que no te gusta o te resulta deprimente, pero parece que nunca te llaman para el puesto de tus sueños, así que terminas por aceptar lo que no quieres. ¿Te sientes indentificado/a? Aunque no hay una fórmula secreta para encontrar el trabajo perfecto, en este post vamos a darte algunas ideas un poco creativas para optimizar al máximo tu búsqueda.
Enfócate y reflexiona sobre lo que te gustaría hacer de verdad
Si no sabes qué es lo que te gusta, es normal que no encuentres trabajo de algo que te haga feliz. Si llevas tiempo mirando, te recomendamos que frenes tu búsqueda y reflexiones sobre quién eres y sobre cómo te gustaría estar en el futuro. Piensa en tus propias habilidades, y en las actividades que disfrutas. Esto es importante porque, una vez que sepas qué es lo que quieres en realidad, ya podrás empezar a enviar tu currículum a sitios concretos, o incluso plantearte iniciar tu propio emprendimiento, en lugar de estar esperando a que aparezca una oferta en algún portal de internet.
Nunca dejes de aprender
Si sigues sin saber qué es lo que te gusta, te recomendamos que no dejes de aprender. Entendemos que no siempre es posible acceder a una carrera universitaria, por cuestiones de tiempo o de dinero. Sin embargo, existen cursos muy útiles que son accesibles a todo el mundo. Desde Intef recomiendan cursos gratuitos para desempleados que van desde el aprendizaje de idiomas, hasta las competencias digitales, la administración, la hostelería, la creación y gestión de microempresas, etc. Mientras aprendes puede que encuentras la respuesta que buscas y logres enfocarte.
Emprende tú mismo/a
Si el trabajo de tus sueños no está disponible, créalo tú o, al menos, intenta emprender en algo que se le parezca. No es, ni mucho menos, la opción más sencilla. Tal vez te resulte más cómodo aceptar ese trabajo que te deprime y que odias, pero nada es imposible y menos, en los tiempos que corren. Gracias a internet y con una buena campaña de márquetin, cualquier negocio puede salir a flote. Incluso es posible emprender con muy poco presupuesto, promocionando tus servicios a través de las redes sociales.
Crea un currículum o portfolio diferente
Parece que se da por hecho que todo el mundo sabe que la presentación del currículum es importante, pero, la realidad, es que hay personas que todavía envían currículums hechos en un procesador de textos, mal ordenados, sin justificar, y de difícil comprensión. De esta manera es probable que ni si quiera lleguen a leer quién eres y lo descarten automáticamente. Presenta un currículum o portfolio creativo, que llame la atención por su diseño y que no deje indiferente a nadie. Si es posible te recomendamos que lo lleves en mano a los sitios y, si lo que quieres es presentar un proyecto personal a través de tu portfolio, explícaselo tú directamente.
Haz un voluntariado
Los voluntariados son una buena opción para quienes no terminan de tener claro lo que quieren hacer. Si no sabes por dónde empezar puedes consultar páginas como Plataforma del voluntariado a donde suben información y noticias relacionadas con esta práctica. Además de ser tremendamente enriquecedor, hacer un voluntariado te brindará una experiencia que, sin lugar a dudas, te servirá para el futuro. Y si viajas a un lugar de habla diferente a la tuya, podrás aprender el idioma, ampliar tu red de contactos y practicar habilidades nuevas.
Estas son sólo algunas ideas para que optimices el tiempo durante tu búsqueda de empleo. Como ya hemos dicho, no existe una fórmula infalible y, muchas veces, no depende de lo mucho que te esfuerces, o de lo preparado que estés, sino de la suerte de estar en el lugar adecuado en el momento adecuado. Lejos de desanimarte, este hecho puede motivarte a dinamizar tus actividades a lo largo del día, ampliar tus redes sociales y hablar con gente diferente. Nunca sabes dónde te puedes encontrar a tu futuro socio/a o a la persona que te presente la oportunidad de tu vida.
Lo más importante es que no pierdas la esperanza, sigue luchando por lo que quieres y, en algún momento, más pronto que tarde, llegará. ¡Mucho ánimo!